Admire Ibiza y las Baleares a bordo del Monara
El Monara combina a la perfección la tradición de los años 60 con la última tecnología
Feadship es una de las referencias a nivel internacional. Su prestigio le ha llevado a ser una marca muy apreciada por el sector de construcción y reparación de barcos, y muy valorada en el alquiler de yates de lujo. De tradición naval, desde hace muchos años, este astillero holandés nació a partir de la unión de los astilleros de las familias Van Lent y De Vries, creando la primera cooperativa de atarazanas de Holanda en 1949.
Monara: tradición, lujo y tecnología unidos en perfecto harmonía
De dicha asociación, nació Monara en 1969. Este yate de 26 metros de eslora está disponible para alquiler en Baleares con base en Ibiza. Su mantenimiento es excelente, fruto de una extensa restauración entre 2012 y 2016. Cinco años atrás, Monara se encontraba en un estado desastroso. Con todo, su nuevo armador tomó la decision de llevarse el yate a Holanda para someterlo a un completo programa de renovación a través del astillero Feadship.
El casco fue modificado completamente, mientras que los dos motores Gardner fueron enviados a Inglaterra para ser reparados. Actualmente, Monara goza de un estado de salud excelente. Excepto el timón y parte de la cubierta, el resto del barco ha sido completamente renovado y modernizado.
Su diseño exterior e interior combina los estilos holandés e italiano gracias a la unión entre Feadship y el diseñador italiano Carlo Riva. Así, alquilar este yate le permitirá gozar de la combinación entre lo tradicional y la tecnología puntera. Durante su refit, Monara mantuvo varios elementos originales del yate de los años 60. La experiencia de ver al Capitán navegar con un timón clásico es altamente recomendable. A su vez, cuenta con dos estabilizadores eléctricos MATN’S, que permiten reducir el balanceo del barco. Basado en un principio dinámico, el giro de un disco a 2000, 5000 o más RPM produce un momento angular que es controlado a través de un cilindro hidráulico, manejado por una computadora situada en el cuadro de mandos. Este momento angular es precisamente lo que permite mantener el eje de giro del barco en posición vertical a pesar del viento o del mal estado del mar.
El yate ideal para alquilar en Baleares
Con capacidad para 8 invitados en 4 camarotes dobles durante la noche, y 12 pasajeros durante el día, Monara es el yate de alquiler ideal para relajarse durante sus vacaciones. Dispone de una velocidad crucero de 8 nudos para descubrir sin ningún tipo de prisa todos los rincones de las Islas Baleares. A bordo, contará con todo tipo de equipamiento y entretenimientos. Además de un exclusivo servicio de Capitán, Marinero, Chef y Azafata, Monara posee un comedor en cubierta con capacidad para 8 personas, además de un solarium.
Su diseño interior, a su vez, cuenta con un salón equipado con sofás de estilo vanguardista para realizar vida social. Todos los camarotes y salones permiten disfrutar de televisión, sistema de audio, y conexión WI-FI de alta velocidad, disponible en todo el barco.
Además, podrá disfrutar con multiples juguetes a su disposición como embarcación auxiliar, esquís acuáticos, snorkel y equipo de pesca. Todas las comodidades necesarias para gozar de unas vacaciones de ensueño en las cristalinas aguas de las Baleares desde una posición exclusiva.
Feadship: Más de cien años de historia
Hablar de Feadship es hablar de historia pura. Holanda se caracterizó por ser una de las grandes potencias marítimas en la época colonial, con una gran presencia en las Índias Orientales a partir del siglo XVI. Los inicios de la compañía se remontan al año 1849, cuando la família Akerboom compró un pequeño astillero de la costa holandesa para dedicarse a la construcción y la reparación de barcos. En 1927 se unieron con la familia Van Lent para fundar la marca en 1949 junto a la familia De Vries.
La delicada situación económica en Europa, debido a las consecuencias que dejó la Segunda Guerra Mundial, obligó a Feadship a buscar su cuota de mercado en Estados Unidos, que se estaba beneficiando de la situación de posguerra europea a través del Plan Marshall. Su presencia en el continente americano aumentó exponencialmente dándose a conocer en 1951 en un evento naval de Nueva York. La influencia norteamericana, a través de personalidades como Henry Ford y Malcolm Forbes, benefició a la compañía y rápidamente modernizaron su producto, abandonando por completo la producción de cascos de madera, y aumentando los tipos de eslora disponibles hasta convertirse en una prestigiosa marca a partir de los años 60.
En los años 80, se perfeccionaron los tipos de diseño exterior para completar su expansión en los años 90. Hoy en día, más de medio siglo después, los valores iniciales de Feadship siguen completamente vigentes. Para el astillero holandés, adaptarse a las necesidades del cliente es uno de sus principios básicos. Consideran que un yate es algo personal y personalizado, y que no puede haber un modelo universal que se intente vender al cliente posteriormente. Por ello, cada proyecto se inicia con una página completamente en blanco a disposición del cliente, para crear un yate único a partir de un nuevo concepto de artesanía, diseño, ingeniería y construcción. Desde la marca siempre aseguran que hay yates y luego está Feadship, una de las referencias en el aquiler de yates de lujo.